Para muchos las investigaciones científicas se han vuelto maldición. Al permitir lo generoso de los descubrimientos en las ciencias y en las artes, Dios ha derramado sobre el mundo raudales de luz; pero aún los espíritus más poderosos, si no son guiados por la Palabra de Dios, se extravían en sus esfuerzos por encontrar las relaciones existentes entre la ciencia y la revelación.
Los conocimientos humanos tanto en las cosas materiales como las espirituales son limitados e imperfectos.
Muchos dan por hechos científicos lo que no pasa de ser meras teorías y elucubraciones, y piensan que la Palabra de Dios debe ser probada por las enseñanzas de la falsamente llamada ciencia. 1Tim.6:20
Los hombres procuran hacerse mas sabios que su Creador; los filósofos intentan sondear y explicar misterios que no serán jamas revelados en el curso infinito de las edades. Si los hombres tan solo se limitasen a escudriñar y comprender las Sagradas Escrituras, llegarían al concepto de la gloria, majestad y poder de Jehova, se darían cuenta de su propia pequeñez y se contentarían con lo que fue revelado para ellos y no negarían la divinidad de Cristo, ni el poder omnipotente del Creador del Universo.
La sabiduría del mundo enseña que la oración no es necesaria y los hombres de ciencia declaran que no puede haber respuesta a las oraciones, que esto equivaldría a una violación de las leyes naturales, a todo un mundo de milagros y que los milagros no existen. Dicen que el universo esta gobernado por leyes inmutables y que Dios mismo no hace nada contrario a esas leyes. De suerte que representan a Dios ligado por sus propias leyes. Como si la operación de las leyes de Dios, excluyesen la libertad divina.
Las teorías evolucionistas, Bing Bang, Universo Oscilante, Estado Estacionario, Inflacionaria, y otras, son derivadas de los propios razonamientos humanos de Lamarck, Darwin y Mendel que desmienten la Omnipotencia y Omnisciencia del Creador al igual que el origen real del hombre.
La frase dicha por Satanás en el Edén a Eva, "Seréis como Dios" (Gen.3:5) encierra totalmente la filosofía de la Evolución. Esta mentira satánica se ha repetido por miles de años hasta llegar al punto de que millones de personas la acepten como un dicho real. El diablo no quiere que creamos que Dios, El Eterno, es el Creador, sino que creamos en las vanas teorías o invenciones de los hombres, que distorsionan la manera sencilla en que la declara la Biblia y asi pisotear todo el origen divino de la creación y de las normas y leyes por las cuales debe regirse el ser humano.
El evolucionismo no es una ciencia, es una religión falsa.
Dad gracias al Señor de los Señores, porque su amor es para siempre. Al único que hace grandes maravillas... que hizo los cielos con entendimiento...al que tendió la tierra sobre las aguas... al que hizo las grandes lumbreras ...la luna y las estrellas.. y al hombre a su imagen y semejanza.
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